Tobey Maguire y Andrew Garfield hicieron un estupendo trabajo en sus respectivas encarnaciones arácnidas, pero todo parece indicar que el título de Spider-Man definitivo será para Tom Holland. Esto no sólo se debe a su 93% de frescura en Rotten Tomatoes –superior al 89% de la araña original–, sino a sus infinitas posibilidades como parte del Marvel Cinematic Universe.
El director Jon Watts es muy consciente de ello, por lo que ya analiza posibles adversarios para futuras entregas. Los rumores más sonados incluyen viejos conocidos como Octopus, Green Goblin o Venom, pero también debutantes como Mysterio o Kraven. Sin embargo, algunos creen que la franquicia podría ir más allá con la incursión vampírica de Blade y Morbius.
¿Pero cuáles son las posibilidades de que la saga se torne colmilluda? El director habló al respecto con We Got This Covered:
"Morbius es cool", declaró al sitio. Pero al ser cuestionado sobre el tono, aseguró que "es bastante obscuro, pero el universo vampírico de Marvel es divertido. Quizá podríamos incluir a Blade, ¿no? Eso sería genial".
Aunque parece poco probable que Blade y Morbius aparezcan en la secuela de De regreso a casa, los vampiros Marvel no deberían ser descartados para la historia: los derechos del primero regresaron recientemente a la casa de las ideas; el segundo es contemplado desde hace tiempo. A esto agreguemos que ambos personajes han cruzado caminos con el arácnido en incontables ocasiones, por lo que su incorporación a la trama no debería representar ningún problema ante la reciente alianza entre Marvel y Sony.
¿Cuál será el futuro de este nuevo Spider-Man? Pronto lo descubriremos. De momento, disfrutemos el estreno de Spider-Man: De regreso a casa y su posterior retorno para Avengers: Infinity War.
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